PNL
La PNL o Programación Neurolingüística es una poderosa herramienta que permite modificar la estructura del pensamiento, el lenguaje, la emoción y el comportamiento de forma que permite alcanzar objetivos personales y mejorar las relaciones con los demás.
Su misión es MODELAR lo que funciona. Hay personas que de manera inconsciente utilizan estrategias que les permiten ser brillantes en lo que hacen. Pues la PNL proporciona habilidades para desarrollar estados de excelencia en comunicación y cambio utilizando esas estrategias de manera consciente, lo que permite gestionar más eficazmente nuestro comportamiento y estados emocionales. Nos explica el comportamiento humano, nos muestra cómo hacemos lo que hacemos, es decir, qué estrategias internas seguimos para estar tristes, alegres, enfadados…
Cuando hablamos de la realidad es muy importante SER CONSCIENTES de que cada ser humano tiene su propia experiencia de la realidad. Cada uno tiene su mapa, pero el mapa no es el territorio. La realidad la percibimos a través de los cinco sentidos. Así, la vista, el oído, el tacto, el olfato y el gusto nos dan información sobre otras personas y también sobre nosotros mismos. Hay personas que perciben mejor a través del sentido del oído, otras a través de la vista, etc. De acuerdo con ello, la PNL clasifica a las personas en visuales (vista), auditivas (oído) y kinestésicas (tacto, olfato y gusto).
La PNL es una disciplina de autoconocimiento, comunicación, aprendizaje y cambio que hace más sencillo el conocimiento de nosotros mismos pues centra su estudio en la explicación del funcionamiento de nuestro cerebro y en la identificación de patrones mentales. Permite el desarrollo personal y profesional a través del modelaje y de la reprogramación de aprendizajes en beneficio de la persona. Es un estudio de la conducta humana que se centra en comprender los procesos mentales y emocionales. Gracias a la PNL se pueden cambiar dichos patrones aplicando técnicas que optimizan nuestra capacidad de comunicación y aprendiendo a procesar neurológicamente la información para ser modificada en nuestro beneficio.
Para mí el ejemplo más sencillo para entender cómo funciona la PNL es pensar en cómo funciona un ordenador: se introducen datos a través de un programa específico, se procesan, se almacenan y se actualizan cada vez que es necesario. En el caso de nuestro cerebro ocurre algo similar: los datos son la información sensorial que recibimos constantemente del exterior, lo que vemos, oímos, sentimos se procesa y almacena en función de la programación que tenemos en nuestro cerebro, y en base a esa programación le otorgamos un significado.
Cuando nos encontramos con una situación similar a otra vivida en el pasado, nuestro cerebro compara los datos que nos llegan ahora con los datos almacenados en nuestra memoria en esa situación pasada. Y nuestra reacción presente irá en función del significado que le hayamos otorgado en el pasado a esos datos.
Por ejemplo, si de pequeño sufriste cuando otros niños se reían de tí cada vez que el profesor te sacaba a la pizarra, terminaste asociando hablar en público con una situación angustiosa y por tanto algo a evitar. Con el paso de los años, cada vez que se te presente una situación similar en el que alguien te invite a hablar en público, lo más normal es que lo rechaces, o hayas creado una fobia o sientas angustia o pánico. Da igual los años que hayan pasado, lo mucho que hayas cambiado o incluso que hayas olvidado de manera consciente el propio suceso porque tu inconsciente almacena esa información en tu mente de forma que ante tales situaciones te dice: “ hablar en público es peligroso”.
Y ahí es donde entra la PNL, para REPROGRAMAR nuestro cerebro, reinterpretando la información que nos llega del exterior y dándole un significado diferente a ciertos sucesos que nos han marcado tan poderosamente.
